El imaginario popular dice que todas las madres tienen que estar preparadas para ser madres. Cuando llega el bebé aflora el instinto.
Aunque esto no es así.
La maternidad no es algo solo del cuerpo, es algo determinado por otros factores.
En los últimos años ha surgido una nueva tendencia acuñada con el término chiffree. Se trata de parejas que en cierto momento de la vida han decidido no tener hijos.
Etapa de muchas emociones
Hay mujeres que desde siempre han tenido claro que querían ser madres, hay otras que no. Cuando la mujer entra en los treinta años se va cuestionando la posibilidad de ser madre.
Es normal que afloren emociones intensas y contrapuestas. Se suele sentir la presión social, ejercida por familiares y amigos que le preguntan constantemente cuándo llegará el bebé, especialmente cuando se tiene una pareja estable.
Son tantos los dilemas que se pueden presentar en esta etapa, precisamente hemos preparado preguntas y puntos para que analicen cómo decidir si estás preparada o no para tener un hijo.
Preguntas clave que te ayudarán a decidir
Para que puedas determinar si quieres ser madre te deberías hacer estas preguntas:
- ¿Te atrae la idea de ser madre o te sientes presionada por las personas alrededor como pareja, amigos o padres?
- ¿estás dispuesta a dedicar tiempo a la carrera para dedicarle tiempo al bebé?
- ¿Tienes la disposición para el cambio en el estilo de vida que supone la llegada de un bebé? No olvides que se es madre todos los días del año y las 24 horas del día y la vida da un vuelco de 180 grados.
- ¿Tienes las condiciones económicas y apoyo social necesario?
- ¿Cuentas con la preparación desde el punto de vista emocional? Criar a un niño demanda una gran dosis de paciencia, asertividad, amor, emocionalidad.
Si llevas mucho tiempo pensándolo y a pesar de que has barajado los pros y contras no te logras decidir, seguramente con el agobio porque el tiempo pasa y sientes que esto juega un papel en tu contra.
Pide ayuda profesional con nosotros para trabajar la parte emocional que te puede estar estancando e impidiendo tomar una decisión.
Luego de trabajar esos miedos podrás elegir qué es lo que quieres realmente y así tendrás o no un bebé, pero harás lo que quieras.
Ser madre es un compromiso muy grande y se tiene que tener la disposición para dar el paso sin que se traiga un hijo al mundo que termine afectado.
Equipo Psiquiatras Online