Cuando va a nacer un bebé muchas madres sienten alegría, agradecimiento, empoderadas por dar vida. Pero muchas mujeres, sienten esto como algo difícil, sienten culpa, sentimientos negativos que afectan las relaciones afectivas y sociales y hasta afectan el vínculo con el bebé.
A continuación veremos qué sucede cuando la madre siente esto y las sensaciones vinculadas.
Los momentos del nacimiento
El embarazo, parto y puerperio son momentos claves para la mujer donde la persona se muestra sensible y puede haber factores personales que afectan la relación entre madre y bebé.
En el embarazo
El vínculo comienza en el útero, el feto percibe las emociones que siente la madre, si la historia ha sido compleja, las hormonas que se dan paso a un periodo de transparencia psíquica donde la mujer siente la necesidad de reparar su historia, especialmente el vínculo son su madre para comenzar la conexión con el bebé.
Si hay temas por resolver es probable que el vínculo afectivo se vea impactado negativamente.
La maternidad y paternidad
Se da en el momento donde se sueña con la llegada del hijo o hija, una madre no surge de la soledad y aislamiento, es el resultado del contexto familiar, social, vincular, económico, tecnológico.
Hacen falta apoyos, condiciones para una gestación sana. Aquí no solo cuenta la madre sino la sociedad.
Parto
Si se da un parto natural o medicado e intervenido que tenga complicaciones médicas o que la mujer no se sienta segura, puede dar paso a una conexión emocional con el bebé que no sea como se espera.
Postparto
Separaciones físicas y emocionales entre la madre y el recién nacido, intervenciones médicas Enel bebé o la madre entre otras cuestiones pueden hacer que no se genere el vínculo emocional fuerte y se vea aplazado.
El puerperio
La falta de apoyo en el cuidado del bebé tanto de la pareja como del entorno, puede causar una mala conexión con el bebé.
Cuando no llega esa ilusión de ser madre
Si la madre tiene un parto respetuoso y se siente empoderada, las hormonas y cambios emocionales la propician, le dan una fuerza interna y externa junto con la conexión. No solo con el bebé sino consigo misma.
Si no se ha sido dueña del parto, del cuerpo y proceso, se puede sentir desconcierto e impotencia que lleva a que se pierda la seguridad en sí misma y sentir que le robaron algo que no es consciente en el modo de ser madre.
Depresión post parto
Es otro de los problemas comunes, se siente tristeza, irritabilidad, ganas de llorar, tras el parto. Por la fatiga y el cambio hormonal el 80% de las mujeres lo padecen en mayor o menos grado.
Cuando pasa mucho tiempo y afecta la vida de la madre se debe buscar ayuda. Por eso recomendamos que si pasa mucho tiempo puedes pedir hora con nosotros para ayudarte. Igualmente si no nace ese deseo de ser madre aun cuando ya ha nacido el niño.
Equipo Psiquiatras Online