Las decisiones pequeñas que tomamos a diario son más valiosas de lo que parece. Desde elegir qué desayunar hasta decidir si dedicar cinco minutos a respirar profundamente, estos actos aparentemente insignificantes forman la base de tu rutina y, con el tiempo, moldean quién somos y cómo vivimos. En psicología, estas decisiones se conocen como “microelecciones” y tienen un impacto acumulativo en nuestro bienestar emocional y mental.
Estas elecciones influyen en la salud física, y afectan la autoestima y percepción de control. Cuando tomamos decisiones conscientes, reforzamos la idea de que somos capaces de dirigir nuestra vida hacia un propósito. Esto genera una sensación de empoderamiento que mejora nuestro estado de ánimo y fortalece nuestra resiliencia frente a los desafíos.
Cómo transformar pequeñas decisiones en grandes cambios
Para aprovechar el poder de las decisiones pequeñas, el primer paso es practicar la atención plena, es estando presente y reflexionar sobre cómo cada acción se alinea con tus valores y objetivos. Estas decisiones, aunque parecen insignificantes, tienen el potencial de generar grandes cambios cuando se realizan de manera consciente y consistente.
Cómo practicar
Practicar la atención plena no requiere cambios drásticos, pero sí compromiso con pequeños ajustes diarios. Aquí tienes un enfoque práctico para hacerlo:
Antes de actuar, pregúntate qué es importante para ti, si valoras tu bienestar físico, podría significar tomar la decisión de caminar 15 minutos después del almuerzo en lugar de quedarte en el sofá. Reflexionar sobre tus prioridades te ayuda a asegurarte de que tus acciones diarias estén alineadas con lo que deseas alcanzar.
Cada vez que enfrentes una elección, detente y evalúa las opciones, cuando sientas el impulso de revisar tus redes sociales por inercia, haz una pausa y pregúntate: “¿Esto me aporta algo positivo o me aleja de mis objetivos?”. Esta pausa te permitirá redirigir tus acciones hacia algo más significativo, como leer un libro o aprender algo nuevo.
No intentes cambiar todo de golpe. Identifica una decisión diaria que puedas transformar en una acción consciente, en vez de posponer la alarma cinco veces, decide levantarte al primer timbre y dedicar unos minutos a estirarte o meditar. Estas pequeñas acciones acumuladas a lo largo del tiempo generan una diferencia tangible.
Es útil tener notas visuales o alarmas que te recuerden tus valores y objetivos, un post-it en tu computadora que diga “¿Esto me acerca a mi meta?” ayuda a ser más consciente de las decisiones que tomas en tu día laboral.
Cómo romper patrones automáticos con apoyo profesional
Si sientes que estás atrapado en patrones de decisiones automáticas que no te benefician, trabajar con un profesional de la salud mental sirve para identificar las causas subyacentes. Muchas veces, estas decisiones automáticas están relacionadas con creencias limitantes, estrés o falta de claridad sobre tus prioridades.
Un terapeuta te guía en este proceso, utilizando técnicas como la terapia cognitivo-conductual (TCC), que te ayudará a reconocer los pensamientos automáticos que influyen en tus elecciones. Por ejemplo, si tiendes a procrastinar, la TCC puede ayudarte a desglosar esa procrastinación en pasos manejables, de modo que aprendas a enfrentarte a las tareas sin sentirte abrumado.
Si deseas construir una vida más consciente y aprender a transformar tus pequeñas decisiones en grandes cambios, estamos aquí para apoyarte.
Equipo Psiquiatras Online