En la nueva era de la digitalización laboral, el teletrabajo ha surgido como una modalidad cada vez más adoptada por empresas de todo el mundo. Aunque presenta ventajas como la flexibilidad y la reducción del tiempo de desplazamiento, también conlleva desafíos significativos para la salud mental de los trabajadores.
Una de las principales repercusiones del teletrabajo es el desdibujamiento de los límites entre la vida laboral y personal. Muchos trabajadores encuentran difícil “desconectar” al final del día, lo que puede llevar a jornadas laborales más largas y a un aumento del estrés. Este estrés prolongado puede desencadenar ansiedad, depresión y agotamiento, especialmente si el trabajador no cuenta con un espacio adecuado en el hogar para realizar sus tareas.
La soledad y el aislamiento son otros efectos colaterales importantes del trabajo remoto. La falta de interacciones cara a cara con los compañeros de trabajo puede disminuir la sensación de pertenencia y afectar negativamente el bienestar emocional. Esto es particularmente cierto para aquellos que viven solos o que dependen en gran medida de sus relaciones en el trabajo para su interacción social.
Además, la supervisión constante a través de medios digitales puede incrementar la presión sobre los empleados para estar siempre disponibles, lo que alimenta un ciclo de trabajo sin fin. Esto no solo afecta la salud mental, sino también la física, ya que el sedentarismo se vuelve más común al omitir el desplazamiento físico al lugar de trabajo.
Consejos para manejar
- Es crucial definir y adherirse a un horario de trabajo específico. Informa a tus colegas y superiores sobre tus horas de disponibilidad y respeta tu propio tiempo desconectándote del trabajo al final del día.
- Aunque no todos disponen de un despacho en casa, es importante delimitar un área específica para trabajar. Esto ayuda a asociar ese espacio con la actividad laboral y a mantener el resto del hogar como un santuario personal.
- Utiliza tecnología para mantener el contacto regular con tus compañeros de trabajo no solo para asuntos laborales, sino también para fomentar relaciones personales. Programa reuniones virtuales informales o cafés virtuales para compartir un momento de distensión.
- Implementa prácticas de bienestar como la meditación, el yoga o ejercicios de respiración para manejar el estrés. Reconoce tus emociones y trata de abordarlas con compasión y sin juicio.
Equipo Psiquiatras Online