Se trata de una adicción a las tecnologías y es un problema que va en aumento en jóvenes y niños. Afecta también a adultos y puede traer consecuencias para todos.
Cómo se define
La conducta adictiva es peligrosa, genera dependencia y no se puede dejar de consumirla a menos que exista una voluntad y una decisión firmes. En cuanto a la adicción a la tecnología, se manifiesta principalmente en un uso inapropiado y excesivo de teléfonos móviles, videojuegos e Internet. La persona empieza a perder la capacidad de gestionar adecuadamente el tiempo, e incluso desarrolla estrés y ansiedad si no puede utilizar la tecnología a la que es adicta.
Síntomas de la adicción a la tecnología
Al igual que con otras adicciones, diferentes cambios en el comportamiento y signos pueden indicar que la persona es adicta a ciertas tecnologías. La atención es importante porque la persona que la nota por primera vez es parte del entorno más reciente. Los amigos y familiares suelen notar cambios en la personalidad y actitud de una persona, y a partir de ese momento se deben tomar medidas para evitar que esto le suceda a los adultos.
- Distanciamiento social inmediato. Los adictos a las nuevas tecnologías suelen interactuar con los demás, pero siempre a través de herramientas informáticas. Escapan del contacto directo en el mundo real.
- Descuido de las actividades diarias. No es raro que los adictos a la tecnología descuiden sus actividades diarias. Desde alimentar y bañar, hasta cuidar mascotas, plantas o las propias personas
- Excesiva dependencia de la tecnología. Las personas adictas a las nuevas tecnologías a menudo se sienten incapaces de realizar actividades de la vida diaria si no se gestionan a través de medios digitales.
- Uso incontrolado y prolongado.
- Ira, tristeza e irritabilidad por incapacidad para el uso de las TIC.
- Reducción del tiempo de sueño y las consecuencias para el organismo.
¿Qué consecuencias trae la adicción a las nuevas tecnologías?
Primero, una persona adicta a las nuevas tecnologías destruye el mundo real y su relación con él, poniendo más énfasis en la versión digital de su vida. En los casos más extremos, suelen sufrir también ataques de fobia. Es un miedo irracional de no tener un teléfono o de no poder usarlo.
La vida diaria del individuo se ve muy comprometida por la incapacidad de comprender e interactuar con el mundo real. Por eso es extremadamente importante trabajar con un profesional de la salud mental para poder recuperarse de una adicción a las nuevas tecnologías.
Equipo Psiquiatras Online