En la historia de tu vida, tú eres el personaje central. Pero, ¿eres el protagonista que toma las riendas, el villano que sabotea su propio camino, o el espectador que observa sin actuar? Este papel no es fijo: cambia según tus decisiones, tu diálogo interno y tu forma de afrontar los retos. Sin embargo, identificar cuál es tu rol predominante te ayudará a entender qué te impulsa y qué te frena.
La vida es una obra donde las decisiones, o su ausencia, marcan tu destino. Ser el protagonista implica liderar tu historia. Ser el villano, actuar desde el dolor o la culpa. Ser espectador, dejar que la vida pase. Y lo más importante: puedes cambiar de papel si decides reescribir tu guion.
Cómo identificar tu papel
- Protagonista: Actúas, decides y asumes consecuencias. No esperas a que las cosas pasen, sino que creas tu propio camino. Cuando cometes errores, aprendes y sigues adelante.
- Villano: Saboteas tu propio progreso, ya sea con decisiones destructivas o con un diálogo interno negativo. A menudo, este papel surge del dolor, el miedo o la culpa.
- Espectador: Vives en automático. Te dejas llevar por las circunstancias o por las decisiones de otros. Te sientes desconectado, como si tu vida no te perteneciera.
Cómo volver a ser el protagonista de tu vida
- Asume la responsabilidad: Deja de culpar al pasado, a otros o a las circunstancias. Pregúntate: “¿Qué puedo hacer hoy para cambiar mi situación?”
- Cuestiona tu diálogo interno: Si tu mente te dice “No puedes” o “No mereces”, pregúntate: “¿Esto es verdad o es una creencia que me limita?”
- Toma decisiones pequeñas: Ser protagonista no es hacer grandes gestos heroicos, sino tomar el control en las pequeñas elecciones diarias.
Si sientes que tu vida va sin rumbo o que te saboteas una y otra vez, un proceso terapéutico puede ayudarte a encontrar claridad. La terapia es ese espacio donde puedes descubrir qué papel estás jugando y cómo reescribir tu historia para convertirte en el verdadero protagonista.
Equipo Psiquiatras Online