Si tienes un hijo entre 12 y 18 años, debes estar atento por si tu hijo tiene depresión. Así no vea signos de problema.
Hacerle una prueba para detectar si tiene depresión
Uno de cada diez adolescentes muestra signos de depresión. Este es un problema grave y muchos adolescentes no reciben la ayuda que necesitan.
Por fortuna la depresión puede tratarse con asesoría profesional. Si contactas con nosotros adecuaremos el tratamiento según sea el caso.
La depresión en adolescente puede ser un grave problema de salud mental. Si ves a tu hijo deprimido puedes:
- Sentir tristeza o irritabilidad casi todo el tiempo.
- Que pierda interés en las actividades que le gustan.
- Tener dolores y malestares sin razón.
- Dormir mucho o que tenga problemas para comer.
- Consumir drogas o beber licor.
- Pensar en muerte o suicidio.
Causas de la depresión en los adolescentes
Cualquier persona puede sufrir depresión si tu hijo está deprimido, no es tu culpa, tampoco de él. Algunas circunstancias pueden aumentar la depresión, como:
- Que sufra una pérdida como separación de familia o una muerte.
- Vivir con personas deprimidas.
- Problemas de salud mental, como ansiedad o trastornos de conducta alimentaria.
- Estrés en la escuela o en casa.
- Tener antecedentes de depresión en familia.
El tratamiento
Lo que sucede si el doctor encuentra que tu hijo tiene signos de depresión es:
- Remitirlo a un terapeuta como los que encuentras con nosotros. Donde recibirá ayuda para tratar los problemas emocionales o de comportamiento.
- Podrían pedirse otras pruebas para ver algún otro signo, esto solo si lo estima el especialista y de la condición del joven.
Signos de alerta de suicidio
Debes estar alerta a las señales de que el niño pueda pensar en un suicidio. Muchas personas que se deprimen no intentan suicidarse. Sin embargo la depresión puede aumentar el riesgo de suicidio.
El suicidio ocupa el segundo lugar entre las principales causas de muerte entre los jóvenes de 15 a 24 años. Estos son los comportamientos que pueden indicar que tu hijo está pensando en el suicidio:
- Dice que quiere matarse o hacerse daño.
- Asume riesgos peligrosos, como conducir un auto con responsabilidad o cruzar una avenida cuando no debe.
- Pasa cada vez menos tiempo con la familia y amigos.
- Puede decir que no estará presente en el futuro o de que “se va a ir”.
- Regala cosas que son importantes para él.
- Aumenta consumo de drogas o licor.
- Dice que ha perdido la esperanza o vive lleno de ira.
Equipo Psiquiatras Online